Dios de la luz
El más benévolo de los æsir es también el dios de la luz y de la paz. Balder era una de las divinidades más veneradas por los vikingos y la envidia de sus semejantes.
Dentro de la mitología nórdica, Balder (Baldr, en nórdico antiguo) es el dios de la luz, y el segundo hijo de Odín. Tiene un papel bastante influyente dentro de la cosmología escandinava por ser un dechado de virtudes y el dios más bondadoso de todos.
¿De qué es dios Balder?
Aunque principalmente se le considera el dios de la luz, no es ésta la única atribución de Balder. Diversos textos e interpretaciones lo pintan como el dios de la paz o, incluso, del perdón. Algo que contrasta, sin duda, con el carácter belicoso de la mayoría de æsir.
Sea como fuera, Balder era uno de los dioses vikingos más idolatrado por los humanos. Sus virtudes físicas eran especialmente destacadas, lo que también suscitaba una serie de envidias en el resto de dioses, sobre todo en Loki. Precisamente por eso, Balder tenía sueños proféticos de muerte, que su madre Frigg interpretaba para tratar de salvarlo de su destino.

Loki engaña a Höðr para que dispare una flecha con muérdago a Balder.
Representación y parentesco de Balder
El dios Balder es hijo de Odín y su esposa Frigg. Es hermano de Hermod y Höðr y hermanastro de Thor o Vidar entre muchos otros. Estaba casado con Nanna, con la que engendró a Forseti, dios de la justicia.
Su morada era un castillo de cristal y plata, el hogar más brillante y bello de todo Asgard. Esta construcción se llamaba Breiðablik y mantenía exactamente todas las cualidades y bondades de su dueño: era limpia, perfecta y libre de todo mal. Por otro lado, también era dueño del Hringhorni, el barco más grande del mundo.
Uno de los símbolos más recurrentes son las flores blancas, como por ejemplo las margaritas. Al tratarse del dios de la paz, es normal que se encuentre este claro símil con la claridad y la tranquilidad. Y, sin embargo, es el muérdago la planta que probablemente mejor refleje su carácter. Según un mito que contamos más adelante, el muérdago le permitió abrirse paso hasta el infierno.
Por otro lado, su cabello largo y rubio representa los rayos del sol. Su nombre no tiene una traducción inequívoca, pero la raíz del mismo se relaciona con la palabra “fuerza” o “valor”, lo que ya ofrece pistas acerca de su carácter.
Principales mitos del dios Balder
Muchos de los mitos en los que interviene Balder tienen que ver con su trágica muerte.
La muerte de Balder provocada por Loki
El hijo de Odín tuvo sueños premonitorios de que alguien iba a matarlo. Se trataba del dios más querido por todos, y, por tanto, también del más envidiado. Se lo contó su poderosa madre para que ésta le ayudase. Entonces Frigg recorrió el mundo para que todo aquello que existiera jurara no lastimar nunca a su hijo. Al ser una figura tan querida, todo cuanto había sobre la tierra respetó la promesa: desde los océanos hasta las montañas y los animales.
Envalentonado por esto, Balder invitó a los demás dioses a que le tiraran cosas, ya que todo rebotaba contra su piel. Loki, indignado y celoso de la fama y gloria del este dios, se disfrazó de anciana y engañó a Frigg para que confesase qué elementos no habían jurado la promesa. La ásynja confesó que, por lo inocente de la planta, no se lo llegó a pedir al muérdago. Una vez Loki tuvo la información, cogió el muérdago y lo convirtió en flecha (o en lanza, según la versión del mito) y se lo dio a Höðr, el hermano ciego de Balder. Sin conocer la artimaña y contento de participar en los juegos de Balder, utilizó el arma de Loki para matar al dios.
Incapaz de soportar la pérdida, su esposa Nanna se arrojó a la pira funeraria de Balder en su magnífico barco Hringhorni.

Thor patea al enano Litr durante el funeral de Balder en su barco Hringhorni.
Intentando resucitar a Balder
Fueron varios los intentos de los dioses para recuperar al hijo de Odín de los infiernos. No en vano, era el muy querido por (casi) todos. Frigg, su madre, pidió ayuda para recuperarlo. El otro hermano de Balder, Hermod, se ofreció como voluntario y tardó nueve días en llegar al infierno.
Finalmente Hela, la diosa del inframundo, le dijo que si absolutamente todas las cosas del planeta lloraban la pérdida del dios, éste regresaría a la vida. De este modo, todo ser lloró desconsoladamente, salvo una giganta, que no sintió pena alguna. Se desveló que esta criatura no era sino Loki disfrazado. El castigo no se hizo esperar, y los dioses lo enterraron bajo tierra, atado a tres puntas de una roca y colocándole encima un conjunto de serpientes que dejaban caer su corrosivo veneno sobre su piel desnuda.
La mujer de Loki, Sigyn, se compadeció de él y sostuvo un caldero justo debajo para que el veneno no tocase al dios. Cuando el caldero se llenaba, la mujer lo movía para vaciarlo. Loki se revolvía de dolor por el veneno que le alcanzaba, y de ahí surgen los terremotos.
Muchas gracias por la información
¡Gracias a ti por leernos, Leo!
Aún tengo la duda, he leído en algunas fuentes que lo hizo por envidia, pero yo tenía entendido que lo había hecho por venganza a lo que le hicieron asu hijo Fenrir
Hola, Camilo.
Loki siempre miraba por su propio interés y era un narcisista absoluto. No necesitaba ningún motivo en particular para seguir sembrando el caos.